En un caso así, la incapacidad del trabajador para el desempeño de sus funcionalidades se genera por una situación de incapacidad temporal donde recibe el alta médica o se le niega la incapacidad persistente, el trabajador regresa a su puesto, pero por el momento no puede hacerlo
El INSS puede denegar la concesión de la incapacidad persistente estimando que el trabajador es capaz para el trabajo, pero la compañía, si considera lo opuesto, puede seguir de 2 formas diferentes:
la incompetencia debe ofrecer ofrecer rincón a un despido propósito?
A fin de que la incompetencia sea acomodada en un desarrollo de despido propósito, debe cumplir algunos requisitos:
- Ha de ser real, o sea, no fingida o simulada.
- Debe existir ocurrido de manera inopinada, lo que quiere decir que debe existir ocurrido de manera inopinada tras la contratación eficaz del trabajador. Si la incapacidad se genera antes de la colocación determinante o a lo largo del periodo de prueba, no va a dar rincón al despido propósito.
- Ha de ser una tontería persistente. La incapacidad temporal no va a dar sitio a la extinción del contrato de trabajo, sino más bien a una suspensión temporal.
- Esto va a haber ocurrido por situaciones del propio trabajador.
- Ha de ser producto de causas extrañas al trabajador, en caso contrario daría sitio a un despido disciplinario y no a un despido propósito.
- Debe perjudicar a las funcionalidades fundamentales y concretas del trabajador en el desempeño del trabajo, y no a las auxiliares o contingentes.
Casos propios de despido por incapacidad sobrevenida
Ciertos casos comunes en los que el trabajador puede ser despedido por incapacidad sobrevenida son:
Enorme invalidez y también incapacidad persistente (total o absoluto) puede ofrecer rincón al despido por incapacidad sobrevenida. En estas situaciones, a fin de que se intente un despido procedente, las restricciones que presente el trabajador van a deber perjudicar al conveniente avance de su trabajo.
Enorme Invalidez y también Invalidez Persistente Total o Absoluta
Estos tres grados de invalidez (incapacidad persistente total, incapacidad persistente absoluta o incapacidad grave) son causales de extinción del contrato de trabajo.
Para justificar la incompetencia inmediata del trabajador, sus restricciones físicas o mentales han de ser fundamentales para el buen avance de su trabajo.
Incapacidad por carecer de titulación u otros requisitos administrativos expertos
La incapacidad puede deducirse de la necesidad de tener ciertas titulaciones o acreditaciones administrativas para ocupar el puesto.
Como un ejemplo evidente, tenemos la posibilidad de señalar: